martes, 16 de marzo de 2010

Bourne: El Ultimátum (The Bourne Ultimatum, 2007)


Hoy voy a hablar de una de las grandes películas de la década.

Hace algunos años, 2002 para ser más exactos, se decretaba el acta de defunción de uno de los personajes más carismáticos del cine: James Bond. Después de esa película horrible que había sido Die Another Day, donde más que una película de espionaje parecía un festival de avisos publicitarios y situaciones imposiblemente patéticas, ya no parecía que hubiera posibilidades de hacer una buena película de espionaje. Ojo, después vino Casino Royale, pero estoy hablando de 2002.
Un par de años después me encontré casi por casualidad con Identidad Desconocida (The Bourne Identity, 2002), un film al que miré con cierto recelo ya que en principio no me inspiraba mucha confianza: Matt Damon en una película de acción y espionaje, que era algo así como que Jet Li hiciera una comedia romántica. Pero al verla me sorprendió, ya que Doug Liman había hecho su mejor trabajo hasta la fecha y Matt Damon no había estado nada mal. En el 2004, se cambiaría el enfoque de lo que se sabía que iba a ser una trilogía: contratar a un director como Paul Greengrass, capaz de filmar escenas de acción y persecuciones con mucha pericia y realismo. Y La Supremacía Bourne (The Bourne Supremacy, 2004) lo tuvo. De las tres es quizás la que menos me agrade, pero Greengrass fue capaz de crear los climas necesarios para que esperásemos una gran explosión en el desenlace de la historia. Y vaya que lo tuvo.

Bourne: El Ultimátum (The Bourne Ultimatum, 2007) es una película virtuosa. Su puesta en escena es grandiosa, en gran parte por el dramático uso de la cámara en mano, que le aportó realismo a las escenas que lo necesitaban. Greengrass, casi como un artesano, construyó cada uno de los climas como para que el suspenso y la tensión fueran las justas y necesarias. Apoyado en un muy buen guión de Tony Gilroy (a tener en cuenta a este señor...) y en una edición realmente excelente, Greengrass logró hacer un uso de las locaciones de las grandes ciudades que más que ser un paseo turístico y regodeo de producción y grandeza fue una puesta al servicio de la historia. Son imperdibles las escenas de la estación Waterloo en Londres; la pelea en Tánger y la soberbia persecución automovilística en Nueva York. Escenas que son una clase magistral de cine.

El final de la historia es efectivo. Después de haber visto semejante pieza cinematográfica, realmente sería una estupidez ponernos a discutir si estuvo bien o mal el final, o si lo tendrían que haber cerrado de otra manera. A mí me satisfizo de principio a fin.

Conclusión: una película de espionaje y acción y suspenso extremadamente interesante, que hace que queramos darle un abrazo a Hollywood por ofrecernos cosas así.

ORIGEN: USA/Alemania
DIRECTOR: Paul Greengrass
INTÉRPRETES: Matt Damon, Joan Allen, David Strathairn
DURACIÓN: 130 minutos

CALIFICACIÓN: EXCELENTE

martes, 2 de marzo de 2010

Clásicos del Cine: una de las mejores escenas de Oldboy (2003)

Una escena que seguramente será recordada a través de los años. El responsable: Park Chan-wook.
Este plano secuencia necesitó 17 tomas y 3 días para que quede perfecto. No se usó ningún truco por computadora, excepto por el cuchillo en la espalda del protagonista.


Simplemente genial.








lunes, 1 de marzo de 2010

El Descanso (The Holiday, 2006)


La review del día de hoy corresponde a esta película romántica del año 2006, El Descanso. En teoría se supone que es una "comedia romántica", y si me pongo algo quisquilloso con las cuestiones de géneros cinematográficos, debo decir que este film de comedia no tiene nada.
A ver... no es que tenga algo en contra de este tipo de películas. Es más, Love Actually figura en mis preferidas, y esa fuera de serie (según mi opinión) que fue 500 Días con Ella son comedias románticas a las que les tengo un gran aprecio.
El tema es que en este caso, no hay nada que pueda ver como positivo. Su directora, Nancy Meyers, hace las típicas "películas para mujeres", lo cual no me parece mal, y como fórmula le resultó redituable a través de los años, pero no puede evitar caer en puntos comunes que ya a esta altura resultan molestos.
Repasemos sus dos películas más conocidas antes de El Descanso: Lo Que Ellas Quieren (What Women Want, 2000), con Mel Gibson y Helen Hunt, una simpática película que se sostenía por el gran carisma de Mel Gibson y un par de situaciones agradables. El resto, lo de siempre: un mujeriego, que no parece importarle nada, por una situación fortuita puede escuchar los pensamientos de las mujeres y a partir de ahí decide sacar provecho hasta que viene la mágica lección de moral de que su comportamiento era el de un verdadero cretino. A partir de ahí, Mel aprende que todos los hombres son cretinos y que las mujeres son sensibles.

Más tarde, vendría Alguien Tiene Que Ceder (Something's Gotta Give, 2003), otra simpática película sostenida por (oh, casualidad!!!) el inmenso carisma de Jack Nicholson, que hace de mujeriego (oia!!!) y después de comportarse como un cretino (Oia!!! x 2) aprende que las mujeres son sensibles y los hombres unos imbéciles. Este film en cierto punto se vuelve insoportable por el personaje (y la actuación) de Diane Keaton, que es irritante a más no poder.

El Descanso ya de por sí nos presenta una situación más que inverosímil: dos mujeres (una cuyo lastimoso amor no correspondido la lleva al borde del suicidio y otra que se entera de que es cornuda) que odian a los hombres deciden a través de Internet hacer un cambio de domicilio a modo de vacaciones para olvidarse por un rato de todo lo malo que los hombres representan. Y digo inverosímil porque los únicos intercambios eran los que se hacían en el colegio o en el club de basquet, y no "el me prestás tu casa que yo te presto la mía" que vemos acá. No sé ustedes pero a mí me resulta más que inverosímil.

Así es como comienza todo, y cada una de las mujeres terminará en su lugar de destino involucrándose con algún hombre que viene a cambiarles la vida, en los excesivos 138 minutos que dura la cinta.

Por el lado de las actuaciones, tenemos a Kate Winslet, que irradia, como siempre ese charme inglés que tan bien le queda. Es una pena que se la note contenida y al borde de la idiotez por culpa de un guión flojo, ya que la considero una gran, gran actriz.
También está Jude Law, que aporta, al igual que Winslet, el charme de siempre. Law sabe como moverse frente a cámara, y a pesar de que mucho no le cueste, ganarse a la platea femenina. Y más si goza con el beneplácito del guión, que no voy a contar qué es, pero de seguro hará que las mujeres se babeen aunque él se ate los cordones de los zapatos.
Jack Black está totalmente desperdiciado, y queda relegado a ser un simple actor de reparto, sin posibilidad de desplegar todo su histrionismo y locura características. Otro personaje que aparece en pantalla es nada más ni nada menos que Eli Wallach, el Feo de El Bueno, El Malo y El Feo (Il Buono, Il Brutto, Il Cattivo, 1966), aquel inolvidable western con Clint Wastwood, que, con sus 94 años a cuestas la sigue remando.

Párrafo aparte para Cameron Diaz. Al margen de que es una mina que no me gusta y que me cae particularmente mal, en esta película se va de tema. A ver, en Los Ángeles de Charlie hacía un papel de una mina media retardada, pero bueno, era parte de la temática festiva y alegre del film. Aquí, sin embargo, continúa en la misma senda, nada más que en serio. Pareciera que cada vez que la enfocan necesitara gesticular y sacudir el pelo nerviosamente, como si eso enriqueciera el plano. No. Resulta muy irritante. A algunos le puede resultar simpática, pero no es mi caso. Acá se pasa de molesta (convengamos que el guión hace que sea así) y pareciera que es la "postura Cameron Díaz" para cualquier película que le toque hacer. Algo similar a lo que sucedía con la mencionada Diane Keaton.

En fin, de seguro a las mujeres les agrada, y los hombres resoplan de fastidio. Quizás mi molestia se deba a que en su momento esperaba algo más de esta película y realmente salí muy defraudado. Mejor no decir nada de la escena final, que bueno, es una...

Conclusión: una opción para esos fines de semana en que nos encerramos al estilo Howard Hughes a ver películas y se nos acabó todo lo bueno que teníamos a mano.

ORIGEN: USA
DIRECTOR: Nancy Meyers
INTÉRPRETES: Kate Winslet, Cameron Díaz, Jude Law, Jack Black
DURACIÓN: 138 minutos

CALIFICACIÓN: REGULAR